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Sillas vacías

8 ago. 2023
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Por Laura

Hoy, más que nunca, hubiera querido estar en Cali.

Hoy Comunes, junto a mucha gente increíble con la que se lucha y se construye permanentemente, llenó la Plaza de San Francisco con pancartas, banderas y 390 sillas vacías, una por cada compañero o compañera firmante de paz que fue asesinado o asesinada desde 2016.

Y se me erizó la piel viendo la foto. Porque la cifra es grande y la angustia crece cada vez que recibimos la noticia de otro asesinato; pero otra cosa es ver el espacio tomado. Imaginarles sentados, sentadas, allí; imaginar sus rostros, sus historias, sus proyectos futuros.

¿A quién le cabe en la cabeza que a un proceso de paz le falten 390 personas? 390 de sus protagonistas.

¿Hasta dónde puede llegar la sordidez de esta guerra que no termina, como para que tengamos que seguir enterrando a quienes decidieron luchar desde otro lugar y con otras herramientas?

Intento repasar los nombres y no recuerdo la mayoría. A varios, a varias he llorado, incluso, sin haberles conocido, por descubrir su historia en el dolor de sus seres queridos, o por la manera tan cruel en las que se les arrebató la vida.

Siempre que veo que crece esa cifra, pienso en que es una mierda que para mucha gente sea solo eso, una cifra.

Siento el riesgo que se vive en este país de deshumanizar la vida y, en especial, la muerte; que deje de importarnos, que se nos haga tan cotidiana que no nos escandalice ni nos movilice para cambiarlo todo.

También, pienso en mi cucho, en su muerte violenta, en la manera en que intentan seguirlo matando desde las narrativas de las victorias militares y algunos medios de comunicación. Pero, sobre todo, pienso que, de cierta forma, murió en su ley. «Yo me muero como viví», dice el poeta/cantor. Y ser de la dirección de una guerrilla lleva tatuada, por supuesto, la muerte violenta como posibilidad.

¿Pero, qué podemos decir de quienes decidieron asumir otras formas de lucha?

¿Qué le podemos decir a quienes queremos sumar a nuevos procesos de paz?

¿Qué nos podemos decir como país que intenta sanar las heridas de la guerra mientras se siguen abriendo otras cada día?

¿Después de cuántas muertes vamos a decir ¡Basta!?

#QueCeseLaHorribleNoche

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